Hablar de inteligencia artificial (IA) está a la orden del día en múltiples campos y aspectos de la vida, ¡y el mundo Fintech no podía ser menos! Esta revolución tecnológica ha dado lugar a la aparición de un ecosistema donde las tecnologías financieras se fusionan con la IA para ofrecer servicios digitales innovadores.
La IA está redefiniendo la industria financiera, impulsando una transformación digital sin precedentes en el sector. Se trata de una herramienta que permite automatizar procesos, analizar datos, predecir comportamientos y ofrecer servicios personalizados. Todo esto se traduce en una mayor eficiencia, menor coste, mayor satisfacción de los clientes y considerables beneficios para las empresas.
Gracias a la IA se pueden hacer cosas como pagar, ahorrar, invertir, o evitar estafas y prevenir impagos de un modo más rápido, seguro y fácil, debido a que optimiza el trabajo de expertos en fraudes, permitiendo centrarse en casos de mayor nivel, mientras se va moviendo detrás de la escena para identificar problemas más pequeños y asistir en la identificación temprana de nuevas formas de defraudar.
Otro caso de uso muy interesante es la atención al cliente automatizada por medio de chatbots. Estos softwares están siempre preparados para ayudar, mejorando la experiencia del usuario, puesto que las preguntas son respondidas al momento.
Además de todo lo anterior, la IA desempeña también un papel fundamental en la evaluación de crédito, introduciendo mejoras significativas en el proceso, como un análisis de datos más complejo, mayor velocidad, predicciones más precisas y reducción del sesgo, identificando tendencias y patrones en los datos de crédito. Esto permite ser más precisos sobre la capacidad de pago y riesgo crediticio, al mismo tiempo que evalúa las solicitudes de crédito de manera rápida y eficiente, acelerando el proceso de aprobación y, en definitiva, mejorando la experiencia del cliente.
Entidades financieras como ABANCA aprovechamos la inteligencia artificial de muchas maneras, desde el análisis y la gestión de grandes cantidades de datos, hasta el suministro de información valiosa. Las técnicas de aprendizaje automático en las Fintech hacen que sean capaces de recopilar y analizar conjuntos de datos extremadamente grandes en tiempo real y, lo que es más importante, tienen la capacidad de aprender de los resultados y realizar mejoras.
En resumen, la diversidad de segmentos Fintech es esencial por razones como la innovación constante, la atención a diferentes necesidades, la resiliencia del ecosistema y las oportunidades de colaboración. Cada segmento busca desarrollar soluciones únicas y mejoradas, lo que beneficia a los consumidores y las empresas. Dicha diversidad de segmentos reduce la dependencia de un solo nicho de mercado, haciendo que el ecosistema Fintech sea más resistente a las fluctuaciones económicas.
Por eso no podemos acabar de otro modo que diciendo ¡larga vida a la IA!
