▷ Todas las DIFERENCIAS entre Incubadora y Aceleradora | ¿Cuál es mejor?

por | Nov 16, 2017 | Opinión

Se parecen…pero no son lo mismo.

En ABANCA innova os hemos hablado de qué es la aceleración o qué es un mentor, pero hasta ahora no  hemos hablado de otro tipo de apoyo a los proyectos innovadores: la incubación. Este método tiene sus particularidades, que os contaremos en esta entrada.

 

¿Qué es una incubadora?

Generalmente, una incubadora se define como una empresa que se encarga de buscar futuras startups que tengan potencial de salida al mercado.

Cuentan habitualmente con personal con mucha experiencia en el mercado, expertos y asesores que tratan, en colaboración con las startups, desarrollarlas para que lleguen a un punto en el que estén listas para salir al mercado.

El término incubación viene del símil con el proceso de incubación que recibe un ser vivo nacido antes de tiempo, que pasa un tiempo dentro de una incubadora hasta que está listo para salir al mundo real. Esa incubadora le proporciona un espacio aislado, alimento y sustento mientras no puede valerse por sí mismo.

Existe una serie de fases diferenciadas en la incubación:

Pre-incubación: El proceso de pre-incubación sucede antes de que las startups sean seleccionadas para el programa de incubación. Por lo general, deberán presentar sus ideas frente a un grupo de expertos que valorarán tanto la originalidad de la idea, como el equipo o las previsiones de futuro de la misma, para lo cual deberán crear un plan de negocio y un plan estratégico que ayude a aclarar cuáles son los objetivos de la startup.

Incubación: Una vez que se han seleccionado las startups que formarán parte del programa de incubación, las empresas se incorporan a las instalaciones de la incubadora y pasa un tiempo que puede variar entre los 5 meses y un año, en la cual gracias al trabajo de mentorización, consejos, sinergias con otras empresas de la incubadora, etc… se conseguirá desarrollar tanto la idea como el modelo de negocio de la misma,  ayudándolas en su proceso de definición de la startup.

Post-incubación: El proceso siguiente a la incubación consiste en comprobar que se hayan asimilado los conceptos y se haya mejorado la startup a lo largo del proyecto, y se les suele aconsejar acerca de las posibilidades de crecimiento a corto y medio plazo.

 

¿Qué tipo de incubadoras existen?

Al igual que sucedía con las aceleradoras, se pueden clasificar las incubadoras de muchas maneras, pero una distinción clara es si son verticales o transversales.

En el caso de las incubadoras verticales, buscarán un nicho en el que se centrarán e intentarán reunir startups que se adecuen al mismo. Esto fomenta las sinergias entre las startups, pero reduce en la diversidad de perfiles que te podrás encontrar.

En cambio, las incubadoras horizontales buscan una serie de proyectos más multidisciplinares, buscando así la transferencia de conocimientos, ayuda, nuevos puntos de vista, etc…

Entonces, ¿cuál es la diferencia?

La diferencia, principalmente, entre una incubadora y una aceleradora radica en la selección de las startups participantes y el momento de su ciclo de vida en el que se encuentran.

Las incubadoras se centran principalmente en startups que están comenzando, y las ayudan a definir su producto y/o su modelo de negocio para conseguir que lleguen al mercado con una garantía de que su proyecto puede tener éxito.

En cambio, una aceleradora busca un proyecto que ya esté formado, tenga un equipo, esté constituido, tenga un producto y las primeras métricas, y las ayudan a mejorarlos para que tenga mayor éxito en el mercado, basándose en la mentorización para mejorar la startup y hacer que el producto avance con mayor rapidez, pudiendo consultar sus dudas con expertos del sector.

Por lo tanto, la elección de una u otra dependerá de la fase en la que se encuentre el proyecto. Si está comenzando, una incubadora será mucho más útil que una aceleradora, y viceversa, una incubadora no servirá para aquel proyecto que ya esté en el mercado y tenga sus primeras métricas.

De todas maneras, es muy útil participar en un programa de incubación o de aceleración, como el que ofrecemos en ABANCA innova by Conector, ya que ayudarán a tu startup a crecer en el corto, medio y largo plazo.